leon

El león, siempre conocido por ser el rey de la selva, es muy sociable, es el único felino que vive en manadas, usualmente compuestas por hasta 15 hembras, de 1 a 3 machos y muchos cachorros, todos ellos menores de tres años.


Características físicas

Llega a medir de adulto entre 1.40 y 2.30 metros, sin incluir la cola, la cual puede medir de 68 a 100 cm. De forma silvestre viven entre 10 y 16 años, mientras que en cautiverio pueden llegar a vivir entre 20 y 25 años.
Los machos se diferencian bastante fácilmente de las hembras ya que tienen una melena abundante, además de que son más robustos. Algunos machos tienen la melena de color negra, pero la mayoría la tienen de color más claro, aunque siempre más oscura que el color del pelaje del cuerpo. Los machos pesan un 45 % más que las hembras, y su pelaje es de color dorado, llegando a alcanzar los 225 kg.
Su vista es muy buena y tienen una visión nocturna seis veces mejor que la de los humanos. Sus oídos son tan sensibles que les permite escuchar hasta la presa más pequeña, un ratón. Tienen una mandíbula y unos dientes muy fuertes.

Hábitat

Habitan al sur del Sahara, en África, y en el noroeste de la India.

Reproducción

Las hembras tienen de dos a cuatro cachorros por parición, y el tiempo de gestación es de 100 días. Para parir, las leonas se apartan de la manada.

Alimentación

Durante los primeros tres meses los cachorros solo se alimentan de la leche de la madre, luego ya tienen todos sus dientes y comienzan a comer carne.
Usualmente la caza la realizan las hembras, las cuales acechan a las cebras, a los antílopes, a los búfalos africanos y a varios animales más, y aunque las hembras tienen la tarea de cazar, los primeros en comer son siempre los machos. Cuando salen de caza, que no son todos los días, las leonas ocupan de dos a tres horas en esta actividad. La principal tarea del león es cuidar de la manada, no buscar alimento.

Información general

Las hembras también tienen la tarea de criar a los cachorros. Son muy protectoras de sus hijos, los transportan en sus bocas y así los defienden de los machos invasores, que suelen matar a las crías para que así las hembras queden libres y puedan aparearse con ellos.
Los machos tienen la importante tarea de proteger a su manada y su territorio. Siempre están atentos para prevenir cualquier ataque, especialmente de otros leones machos ajenos a la manada. Para esto rugen, y lo hacen tan fuerte que los rugidos se pueden llegar a escuchar a ocho kilómetros de distancia, y lo utilizan para advertir la presencia de intrusos en su territorio y así reunir a toda la manada.

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